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viernes, 22 de abril de 2011

Filtros

Los filtros

Hoy en día cuando hablamos de filtros tenemos que especificar si se trata de filtros físicos o filtros virtuales (como por ejemplo los de Photoshop). Se sabe que actualmente se puede simular mediante los programas de edición fotográfica como Photoshop y otros la mayoría de filtros físicos que antiguamente eran tan apreciados por los fotógrafos de las cámaras de película. Sin embargo, hay algunos filtros, como es el caso de los polarizadores, que no pueden ser simulados por el ordenador. Por otro lado, se observa en los últimos años un retorno a los filtros físicos. Tal vez los más utilizados hoy en día -después de los filtros UV de protección- sean los filtros ND y los ND Graduados o Degradados, además de los polarizados. En general los filtros sirven para modificar la tonalidad o simplemente la entrada de luz que pasa al objetivo y al sensor de la cámara.

Un filtro polarizador lo que hace es, como indica su nombre modificar las características de refracción o reflexión de la luz. Con esto podemos conseguir varias cosas: evitar los molestos reflejos que producen las superficies metálicas o acristaladas, mejorar el aspecto del cielo en nuestras fotografías. Es bien sabido entre los pescadores que el uso de gafas de cristales polarizados mejora la visión de los peces dentro del agua al evitar los reflejos del sol, por ejemplo. En los filtros polarizados se puede regular la intensidad de la polarización girando el filtro. Hay polarizadores circulares y lineales. Si vamos a utilizar la función de enfoque automático (AF) de nuestra cámara, debemos utilizar filtros polarizados circulares, quedando los lineales relegados al uso del enfoque manual.   

 
En cuanto a los filtros ND y ND Degradados su función es simple: limitar el paso de la luz sin alterar los colores. ¿Para qué podríamos querer limitar el paso de la luz, si en fotografía se trata de captar la luz reflejada por los objetos? Por ejemplo cuando queremos hacer una exposición especialmente larga. Lo que haremos de primeras será utilizar un número F alto, es decir un diafragma bastante cerrado. Un diafragma muy cerrado evita que entre mucha luz y, normalmente una velocidad de obturación alta hace lo mismo, pero a veces nos interesa captar una escena urbana o un paisaje marino dejando el obturador abierto durante uno o más segundos (se consiguen efectos espectaculares). Para ello debemos ayudarnos de un filtro ND que “recorte” 1, 2, 3 o más pasos de diafragma. Otro motivo para querer utilizar un filtro ND es conseguir una profundidad de campo corta, para lo que debemos utilizar un Nº F pequeño, es decir, abrir el diafragma, por ejemplo a f/2.4 o f/3.5. Aquí también nos viene bien el uso de un filtro ND. La diferencia con los ND Degradados es simple: la mitad del cristal es oscuro y la otra mitad transparente. Obviamente está pensado para escenas donde queremos emparejar la luminosidad del cielo con el resto (la parte inferior) del paisaje. Son muy útiles para fotografía de paisajes. 

Respecto a tipos y marcas de filtros hay muchas opciones: B+W, Tiffen, Hama, Kasemann, etc. Yo recomiendo especialmente los filtros Cokin que no son redondos sino rectangulares y se montan con un portafiltros al uso. De esta forma podemos tener un solo filtro para todos los diámetros de objetivos que vayamos a utilizar, ya que algunos filtros, como los polarizadores son especialmente caros.



En mi experiencia particular, hoy en día no se necesitan más de 3 o 4 filtros, ya que los efectos especiales como velocidad, doble exposición, destellos, virados de color, etc. se pueden conseguir perfectamente con programas como Photoshop, algo que un fotógrafo hoy en día está obligado a conocer, al menos en su concepto básico.

Existen varias series de filtros Cokin: A, P, Z, X según el diámetro máximo del objetivo donde se colocará el portafiltros. Quizás la más extendida es la serie P que admite diámetros de hasta 82mm, con lo que se cubre la gran mayoría de objetivos de las DSLR actuales. Además se utilizan arandelas adaptadoras para montar el portafiltros en los distintos objetivos que tengamos. Si por ejemplo tenemos un objetivo de 58mm de diámetro como el Canon 50mm f/1.4, un Tamron 18-270mm de 72mm y un Canon 24-70mm de 77mm, necesitaremos 3 arandelas adaptadoras de 58mm, 72mm y 77mm para poder montar el portafiltros Cokin en cada uno de estos objetivos. La ventaja es que solamente necesitaremos tener un filtro polarizador para todos estos objetivos, ahorrándonos dinero y espacio en la maleta o mochila de fotografía.
 

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